DFM024 Federico el Grande el auge de Prusia

«¿Qué es lo que le hizo ser “el primer hombre de su siglo”? No fue su ingenioso cinismo, ni su voluminoso corpus de escritos, ni sus reformas jurídicas, sino sus sangrientas batallas por la posesión de Silesia». (R. Augstein, Preussens Friedrich und die Deutschen, Frankfurt, 1968, p. 265). Federico II de Prusia, más conocido como Federico el Grande, alcanzó el Olimpo de los dioses de la guerra aún en vida. De 1740 a 1763 su reinado fue una continua sucesión de batallas en las que el genio militar del monarca quedó de manifiesto. Este número de Desperta Ferro Historia Moderna se centra en los dos primeros años de la Guerra de los Siete Años (1756-1763), que consolidan el auge de Prusia como potencia militar en la Europa de la Ilustración. Fue en 1757 cuando el general más conocido y emblemático de la guerra ilustrada ganó sus victorias más resonantes: Rossbach y Leuthen. Las dos batallas, que aún sorprenden por las circunstancias a las que Federico, sus generales, oficiales y soldados tuvieron que hacer frente para lograr derrotar a sus enemigos –sin importar su número ni la estación del año en la que se tuvo que combatir. Por tanto, no es de extrañar que todavía hoy tanto él como sus campañas atraigan la atención de numerosos historiadores políticos y militares.